jueves, 4 de febrero de 2010

La casa de las Diez Ventanas

IV

En el reloj de la sala dieron las siete y media cuando entraron las dos muchachas a la casa. Subieron a la habitación que compartían y Aurora se dejo caer en la cama.
- ¿Sabes? … esto es de fabula.
- ¿Por qué dices eso?
- Por qué no me creo que sean por fin mis primeras vacaciones en plan guay. Tu vienes todos los años a disfrutar de la playa y todo eso, pero yo me quedo en casa pasando calor y con suerte ganando algún dinerito extra en algún que otro trabajo que me salga.
- Ya comprendo, son tus primeras vacaciones de verdad.
- Verdaderas vacaciones que no tienes que preocuparte por nada… es… es como un sueño.
- Con la diferencia de que no estas durmiendo… estas despierta.
- Si..- dijo lentamente.- Estoy despierta.- y sin saber porque su mirada se dirigió directamente a la ventana que estaba con la persiana media para que no pasase tanto el sol.
- Ahora antes de irnos subiremos la persiana y abriremos un poco la ventana, así luego entrara la brisa marina y cuando volvamos estará el dormitorio mas fresquito.
- ¿Vas a ducharte o lo hago…. – unos golpecitos en la puerta interrumpió la frase.
- Crist, tu abuelo quiere verte.
- Creo que eso contesta a tu pregunta.- le comento mientras se marchaba para la puerta.- Ya voy abuela.
Aurora vio como su amiga se marchaba y cuando quedo sola en el dormitorio se acerco a la ventana, levanto un poco mas la persiana y allí estaba, intrigante y misteriosa, la casa.

- Tu abuelo esta esperándote en la cochera.
- Bien.- dijo mientras se marchaba.
Entro a la cochera y vio a su abuelo limpiando su precioso Audi A8. Estaba tan adsorbido por esta actividad que no se dio cuenta de la entrada de su nieta. Esta espero paciente a que saliera de su tarea. Después de un rato paro un momento y miro la maravilla mecanica que tenía delante, entonces se dio cuenta de la presencia.
- Vaya, ya estas aquí… no te he oído entrar.
- Me he dado cuenta.
- ¿Por qué no me has dicho que ya estabas aquí?
- Es que estabas tan abtraido que…
- Ya… oye, tu tenías ya carnet de conducir si mal no recuerdo..
- Me lo saque el año pasado.. ¿No te acuerdas que os lleve al Salón Esmeralda para la boda de la hija de vuestra vecina y luego os recogí?
- Cierto… cierto… pues entonces…- hizo una pequeña pausa antes de continuar.- Os voy a dejar esta noche..
Si… pensó… el Au…
- A Sisi.
¿Sisi? …. a Crist se le fue el alma a los pies, instintivamente miro hacia el pequeño y amarillo seiscientos que estaba al lado del gran coche.
- ¿Qué te parece, preciosa? … ¡A que es genial!
- Si, genial.- dijo intentando que su voz no sonase decepcionada.
- Bien, pues lo tendrás que limpiar, supongo que no querrás mancharte la ropita de salir.
¿Y encima tenía que limpiar el coche?... mas vale irse andando. Miro a su abuelo dispuesta a rechazar el ofrecimiento pero la mirada ilusionada del anciano la hizo cambiar de opinión.
- Avisare a Aurora para que me ayude a limpiarlo.
Con esas palabras salió aún mal humorada y subió las escaleras en busca de su amiga. Esta elegía la ropa que se iba a poner para salir cuando Crist irrumpio en el cuarto.
- ¿Qué quería tu abuelo?
- Mi abuelo me ha dejado a “Sisi”.
- Que divertido, el Seiscientos!!
- ¿Divertido?... Yo hubiese preferido el Audi.
- Pues a mi me mola “Sisi”, hasta el nombre esta guay.
- Ya… ya…. pero es que encima hay que limpiarlo.
Aurora sonrió abiertamente.
- Mientras antes lo limpiemos, antes estaremos en la calle.. – Crist se quedo un poco parada.- Vamos nena.- Y con estas palabras paso delante de ella dispuesta a limpiar el seiscientos.

El abuelo contemplo el pequeño automóvil y sonrió de oreja a oreja.
- Realmente habéis sido concienzudas, yo jamás lo hubiera dejado tan limpio.- Sonrió como un colegial.- Sabéis, este coche fue el primero que compre. Fueron los ahorros de algunos años de trabajo, si… años… pues poco a poco fui ahorrando para poder comprármelo. Con él corteje a tu abuela, ella fue quien le puso el nombre de “Sisi”. Con él me fui de viaje de novios, y tu madre casi nace también ahí. Después la vida mejoro y me pude comprar otros coches mejores, pero siempre lo he conservado, nunca lo he querido cambiar pues lo que he vivido en este coche es irrepetible.- miro a Crist y a Aurora como si las viera por primera vez.- Espero que vosotras viváis cosas realmente buenas llevando este coche.
Crist siempre había visto aquel coche como una vieja tartana, pero después del discurso lo empezó a ver de otra manera, incluso le empezó a gustar aquel pequeño vehículo. Sin poder evitarlo le dio un calido abrazo a su abuelo sintiendo que era el mejor abuelo del mundo. Cuando por fin lo soltó subieron a “Sisi” y salieron en busca de un poco de marcha.

Eran las tres de la mañana cuando entraron al dormitorio que ocupaban las dos amigas. Venían muy contentas después de una velada maravillosa, a la panda le había encantado “Sisi” y la verdad es que para ser tan viejecito estaba muy bien conservado. Aurora no supo porque pero pensó que había visto una ráfaga de luz en la casa de enfrente al entrar… como en su sueño, pero esta vez no estaba durmiendo.
- Crist… - supo que aquello ya lo había preguntado.- ¿La casa de enfrente esta realmente deshabitada?
- Si, ¿Cuántas veces te lo voy a tener que decir?
- He visto una luz.
- ¿Luz? .- Crist se acerco a la ventana y miro con intensidad.- Yo no veo nada.. habrá sido el reflejo de la luna, esta llena.
Como en su sueño era el reflejo de la luna, pero en su sueño había algo mas…
- Estoy muerta de sueño, voy a acostarme.
- Crist…. ¿Tu nunca has visto nada hay enfrente?
- No… duérmete ya.. que pesadita te pones hija.- suspiro antes de terminar.- Mañana te voy a levantar súper temprano para andar un rato y ver amanecer desde la playa, así que espero que respondas.
Aurora se quedo un rato mas en la ventana observando la casa. El sueño la invadió poco a poco y se acostó, antes de evadirse en los brazos de Morfeo una sutil sonrisa le vino a la mente.

2 comentarios:

noeli dijo...

No puedo parar de leer, vaya vicoio ajajajaa, Anita, gracias como siempre, sin exagerar.. :) que buen relato!!, muchos besos besos

Ana dijo...

Tu siempre me das ganas de seguir escribiendo... es estupendo!
Besos para ti Noeli Bonita!